domingo, 13 de abril de 2025

Una enfermedad del alma

 

“Hoy en día se sabe que no hay grandes diferencias entre el control de un apéndice y la expresión de una emoción. Las enfermedades neurológicas y las psiquiátricas no tienen por qué catalogarse en compartimentos distintos porque no hay dos compartimentos distintos, solo hay uno, en el que están el cerebro) y todas las propiedades que de ellos se derivan (la mente y sus efectos). Todo está en nuestro genoma. Todas las enfermedades sin excepción son biológicas y, en los circuitos cerebrales que controlan la mente, está la solución”.

El miedo es el enemigo del conocimiento porque este aniquila a aquel.

“La memoria y la personalidad inseparables nos hacen únicos. Somos lo que somos gracias a lo que hemos aprendido y a lo que recordamos. La destrucción de éstas borra nuestra propia identidad, nuestra propia alma. La memoria, además de almacenar datos, implica numerosos procedimientos que ejercen las neuronas y sus sinapsis. Adquirir nuevos conocimientos, utilizarlos y almacenarlos se efectúa mediante la percepción, la recuperación y el almacenamiento a corto o largo plazo involucrando a la memoria. Una memoria (implícita, emocional, declarativa, prospectiva, consciente, motora, inconsciente o automática, semántica o mnemotécnica, asociativa, social, episódica) no es sino el resultado de engramas o neuronas interconectadas mediante sinapsis”.

“El alma proviene de cada neurona, de cada conexión sináptica, de cada circuito, de cada región anatómica que compone nuestro cerebro y cuyo funcionamiento, como un todo interrelacionado, permite que seamos quienes somos; por tanto, tratar de comprender nuestras acciones, lo que llamamos conducta, recuerdos, pensamientos, emociones sin atender a que somos procesos biológicos, es una tarea sin sentido. Tenemos ciertos conocimientos, pero aun desconocemos muchas cosas, por ejemplo: ¿Qué sustenta la autoconsciencia? ¿Qué circuitos intervienen en ella? ¿Por qué solo está presente en algunas especies? ¿Cómo se cambian los estados de ánimo? ¿Por qué unos recuerdos persisten más que otros? ¿Por qué unos tienen más memoria que otros? ¿Dónde residen las capacidades en las personas? ¿Cómo desvelar los pensamientos de los demás? ¿Cómo mover con la mente los objetos? ¿De qué forma se puede adivinar el futuro? Para todo ello sería necesario conocer todas y cada una de las conexiones neuronales y cuándo y cómo se activan y cambian.  Nuestros pensamientos son el verdadero reducto de nuestra privacidad. Internet lo intenta cuando uno muestra un deseo, pregunta o se interesa por algo. ¿Puede saber tu ideología? Ya hay tanta publicidad, encuestas, noticias que motivan emociones de dolor, placer, miedo… que influyen directamente en nuestro comportamiento; es decir, el cerebro se modula por la educación, por la actividad que realicemos, por los medios y recursos en los que nos movemos”.

Y si. El miedo nos atrapa sabiendo nuestro destino: riámonos e ironicémosle desenmascarándolo.

domingo, 6 de abril de 2025

IMAGINARIO

 

-            "El que esté libre de pecado que tire la primera piedra".

-            Por mucha democracia que exista, los enchufes campan por sus despechos.

-            Solo se casa quien tiene padrinos.

-            Falsos y cobardes son aquellos que, tirando la piedra, esconden la mano.

-            En el mundo empresarial, o en el de los negocios, el término democracia es irrelevante.

-            Tierras, inmuebles, construcciones y otros bienes que, por litigios u otras causas aún no se terminaron, están abandonados y, posiblemente, jamás serán utilizados u ocupados manteniéndose inservibles por los siglos de los siglos, deberían, después de un tiempo prudencial, pasar a manos del Estado,  la Comunidad, el Municipio o una empresa pública creada al efecto con el fin de que, por el módico precio de conservarlos en un buen estado, puedan dejar de ser zombis o muertos vivientes ensuciando las ciudades, el medio ambiente, algún bello paraje o improductivos. Obsérvese cuantos de ellos existen procedentes, por lo general, de escandalosos ejemplos delictivos o malas actuaciones, por faltas y normas infringidas, escarnios y corrupciones, con licencias o adjudicaciones falsas e ilegales...

-         Téngase presente que nada es para siempre ya que todo está en movimiento. El trabajo en la antigüedad, de sol a sol, destinado especialmente a los esclavos apenas si daba para sobrevivir; sin embargo, pese a que el comer todavía resulta un vicio imprescindible o parezca que todo se repite, los tiempos cambian y el trabajo no es una excepción. Este, sin lugar a duda, no es bueno para el hombre cuando lo realiza por obligación y sin agrado. Al contrario sucede cuando le complace como si no fuera necesario para poder vivir; entonces, será muchos más productivo para la sociedad y para quien lo ejerce, ya que se convierte en una ocupación. Llegará un tiempo que el trabajo sea realizado por máquinas y los humanos tengan que buscarse una ocupación, toda vez que sin ella morirán de aburrimiento.

-            Todo nacimiento es el comienzo de la mortalidad.

-            Los hombres, bajo cuyo poder inmundo vivimos, son fríos y calculadores. (No sé por qué Donald Trump me viene a la cabeza). En ellos descansa la civilización cristiana, ¿pero qué saben ellos de Cristo? A Cristo lo mataron por no querer saber nada de política: un ejemplo que no siguen sus seguidores o los que dicen serlo.

-            Hasta ahora las religiones han sido, y seguirán siendo, modelo de los hábitos y costumbres de las poblaciones allá donde, por muchas y variadas causas, son mayoritarias e imponen sus creencias y metodologías. Obsérvese, sin embargo, que la cristiana protestante, abrazada por una mayoría de ricos y poderosos, viene a decir que los pobres, menesterosos, emigrantes, desfavorecidos, perdedores y demás perseguidos, lo son porque así Dios lo quiere y, por tanto, si Dios no los quiere, ellos tampoco.(Trump y su tropa vuelve a acudir a mi cabeza).

domingo, 30 de marzo de 2025

PREGUNTAS Y CONSIDERACIONES

 

Diez fáciles preguntas personales, políticas y religiosas por donde tu mundo se mueve y con cuyas respuestas podrás deducir su orientación:

¿Cuál es la religión auténtica para ti?

¿Cuál la política que se ha de practicar?

¿Dónde y en qué años naciste y te criaste?

¿Cuál es la religión e ideología con la que actuaban tus progenitores?

¿Qué nivel de vida económica llevaste?

¿Qué educación recibiste?

¿Procedes de una familia rica o humilde, religiosa o incrédula?

¿Te consideras ecuánime y tolerante o egoísta e insolidario?

¿Qué es la verdad?

¿Cuál es tu verdad: la tuya o la que interesa a otros?

Una consideración de Ramiro A. Calle que copio como respuesta y solución a mis cuitas: “Toda polémica sobre la realidad es irrelevante (añadiría inútil e imprudente) perderse en disquisiciones sobre la realidad es necio y banal, porque lo importante es poner las condiciones para ir en su búsqueda (como la felicidad) y encontrarlas”.

“La meditación es fundamental. Mediante ella, ponemos orden nuestro interior, potenciamos la atención y la consciencia, aprendemos a armonizarnos con nosotros mismos y con los demás, acrecentamos la visión, nos ejercitamos con la realidad tal cual, cobramos energía, purificamos el carácter, logramos la ecuanimidad y el desapego mejorando nuestras relaciones con los demás y nuestra sabiduría florecerá”.

“Un alumno desorientado pregunta a su maestro:

-                         -  Maestro, cómo siendo la verdad una puede haber tantas vías y sistemas hacia ella?

El maestro replica:

-                - ¡Qué dices, insensato! Nada de que hay tantas vías. ¡Cada persona es su propia vía, su propio sistema, su propio camino!

Cualquier polémica al respecto carece de importancia. Lo sustancial es meditar”.

Y una consideración propia y final de la que siempre se sacará provecho: Cuida de ti mismo y de los tuyos para lo cual, antes de obrar y manifestarte, trata de ser lo más objetivo posible poniéndote en lugar del otro, teniendo presente que es preferible pecar de exceso de prudencia que mantenerse aguerrido u orgulloso y, por supuesto, hacer siempre lo que se ha de hacer que, por lo general, es lo que la conciencia pide. Por último, piensa que lo fácil es lo correcto: tener calma y tranquilidad, controlar la respiración y observar, hablar poco y solo cuando te pregunten.

domingo, 23 de marzo de 2025

MI PATRIA

 

Hace unos días escuché decir a unos jóvenes que antes se vivía mejor. Intervine en su conversación para que me indicaran cómo y en qué época eso ocurrió: se limitaron a contestar, tal vez porque me conocían, que “con Franco se vivía mejor”.

Mendaces, pensé. Y dada sus edades, sabiendo que ni existían cuando mandaba un dictador, me permití preguntarles: “¿Habéis oído hablar de la Brigada Político Social o del No-Do de aquel tiempo?

Dudaron y ninguno de ellos contestó: lo ignoraban, sin duda.

“Pues bien, -les manifesté-: ambas eran herramientas. La primera, un centro de control de “las Fuerzas del orden” sembrando el miedo con violencia y represión. La segunda, tan poderosa como la anterior, enalteciendo la política del régimen que, obligadamente, había que ver y oír”. No me extendí en más explicaciones aguardando las suyas u otros comentarios que quisieran hacerme seguir.

La mayoría de ellos callaron. Uno, sin embargo, adujo: “ahora pasa lo mismo y ni se tiene curro, ni se puede vivir”. Quise decirle que aprovechara su vida, pues es la única que tendría, pero preferí raspar en mi memoria para que el chaval me oyera decir lo que, seguramente, nunca escuchó ni leyó: “Aunque en la Transición no se cambiaron ni jueces ni policías, hoy, afortunadamente, no son los mismos y se sirven de la Ley en democracia y no por el ordeno y mando de un régimen político que infligía el castigo y la prisión como norma si no algo todavía peor”.

 “Pero se vivía mejor”, insistió el chaval, en tono chulesco.

“Si, efectivamente -le manifesté, irónicamente-, sobre todo, los que desaparecieron o se los llevaron a otras vidas, huyendo o muriendo sin querer, dado el régimen inquisidor franquista, cuya depuración fue un horror. Algo, posiblemente parecido, a lo que ahora sucede en Rusia, Corea del Norte, Venezuela… donde la vida de una persona vale nada o tampoco”.

No quise extenderme más pensando que “nadie escarmienta en cabeza ajena” y recordé mi juventud: lo bien que me fue en la época de los sesenta cuando tenía tres empleos ignorando toda política, careciendo de libertad para hablar, opinar y decidir salvo que se tratara de fútbol, toros u otra diversión inocua, sin saber nada de lo que ocurría, ni siquiera pensar en cuántos estiraban la pata cuando se los llevaban detenidos a la Dirección General de Seguridad la policía, o a sus cuartelillos la Guardia Civil; pues para entonces  la censura, lo prohibido, el Tribunal de Orden Público, el miedo… andaban por sus despechos y solo servían los enchufes, los sobornos, la corrupción.

Era una España triste y gris, en blanco y negro, gobernada por un militar necesitado del silencio de los cuarteles al son de una única trompeta: la suya. Algo que, a veces ahora, oigo desear a los mayores para los jóvenes que, por supuesto, lamento y repudio.

¡Respeto, tolerancia y educación y no las desigualdades económicas tan abismales, es lo que ansío! 

Adiós a Una, Grande y Libre. Bienvenida una sola Patria: la Tierra. La única que ha de existir siendo la de todo ser vivo.

domingo, 16 de marzo de 2025

BREVEDADES

 

“Te ganarás el pan con el sudor de tu frente…” pero hay quien en el teatro de la vida no transpiran como brujos, religiosos, aristócratas y demás personas ineficaces.

Unos dominaban el mundo y la esclavitud. La ocupación liberó al cautivo que, con sus ansias por vivir mejor, convirtió el trabajo en una necesidad.

Ocupar el tiempo en lo que se desea teniendo las necesidades cubiertas es ganar más, sentirse feliz olvidándose de la competencia y la agresividad.

Todo cambia. Acaeció con la rueda, la máquina, la industrialización, la tecnología, la comunicación, el bienestar común, el conocimiento y, siempre, con la duda.

Se comenzó a cuestionar fantaseando, filosofando con lo ocurrido, con lo que está por llegar y, augurando malos presagios, olvidaron vivir y la muerte los sorprendió.

El capitalismo no vino a sustituir a la religión, aunque su poder y dinero se hizo con un dios que no convirtió el agua en vino, pero aprovechó la ingenuidad de la gente.

Pregonaron acabar con el hambre y la miseria y fueron aumentando sus diferencias. Crecieron exponencialmente sin que pudieran divisarse y los más ricos se hicieron más ricos y los más pobres acapararon más pobreza y, entonces, el caos comenzó.

Volvieron los elegidos, los profetas, los nuevos gobernantes predicando contra las atrocidades de los herejes. Hoy, unos y otros, se miran en el espejo y detectan las vetustas y rancias arrugas de sus rostros.

Se extendió y continúa divulgándose por el mundo siendo el temor de una creencia. Una entelequia causante de misterios, guerras y problemas que no responde a ningún bien material de la gente. Las religiones son pues, aporías y negocios.

La supla conciencia se impondrá con la meditación diaria e individual de cada uno. Permitirá al hombre conocer y ejercitar sus sistemas físicos (nervioso, circulatorio, respiratorio, digestivo, excretor, endocrino, inmunológico, reproductor, muscular, esquelético, tegumentario, límbico) y también sus cuitas psíquicas.

Todo regresa. Las circunstancias se repiten, aunque se envuelvan en un disfraz que las disimule. Moros y judíos (no conversos) fueron expulsados de España. Negros, prisioneros como animales, fueron llevados en galeras para ser esclavos en América. Los emigrantes no hallan sitio donde ampararse. Los imperios opresores serán derrotados. Hombres de piel fina están inmóviles en la selva en la que viven.

Las costumbres de trabajar para vivir, ir a la escuela para saber, asearse para no oler mal, rezar para eludir el miedo y otros consuelos habrán de mantenerse; no así las que dañan o son crueles:  corridas de toros, bromas pesadas que hacen llorar, …

Las personas para no repartir beneficios a sus trabajadores crean fundaciones, patronazgos, … para fines que el Estado debería acometer con lo que recauda.

domingo, 9 de marzo de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XX Y ÚLTIMO

 

Los humanos pasaremos de especie dominadora del planeta llamado Tierra a ser subyugados por ella, por su medio ambiente y por otros nuevos pobladores, salvo un grupo selecto de personas ricas y poderosas que, en algún momento, saldrán al espacio exterior con destino desconocido.

Debido al excesivo número de pobladores que quedaron, éstos tuvieron que ingerir alimentos generadores de un semen estéril a fin de reducir su incremento. Los seres u organismos híbridos que surgieron, conforme a su evolución, gobernaron a la raza humana inclementemente, sin miramientos, ni posibilidades de que esta pudiera revelarse para así los recién llegados convertirse en los nuevos dueños de la Tierra.

Todo sucedió lentamente, aunque el dilema atávico entre ciencia y fe nunca fuera resuelto. Luego, en otro tiempo, cuando la rapidez de las comunicaciones, la informática y la Inteligencia Artificial superaran con creces a la inteligencia humana, tuvo lugar, como hemos dicho, a que otra civilización se adueñase del Planeta Azul. Entonces, la vida de humana, mediante la ingestión de fantasiosos e inéditos alimentos no naturales, cuyos átomos pseudo beneficiosos la hicieron retroceder e ir en declive, fue evolucionando y poniendo de manifiesto que el crecimiento eterno no existe y menos aun cuando los recursos materiales, merced a la vorágine del homo sapiens, secaron sus prístinas fuentes. 

Acaeció pues, a partir del atávico egoísmo de la gente rica y poderosa que jamás comprendió que en realidad no hay vida sino seres vivos, dado que, en definitiva, nada se crea ni se destruye, sino que la temperatura, productora de una variabilidad, transforma la energía provocando una cambiante entropía en los sistemas vitales de los seres vivos.

El poderoso y salvaje Sistema Capitalista existente no fue capaz, pese a estar informado, de modular la agresividad de las sociedades bancarias, aseguradoras, energéticas y demás negocios privados por cooperativas y compañías éticas, negándose a cambiar su objetivo principal de ganar dinero a costa de lo que fuera por el del bien común de la gente, que era primordial. Ello colapsó el Sistema convirtiendo el Planeta Azul en un auténtico desastre, agotadas sus materias primas y los alimentos imprescindibles para la supervivencia. Y el mundo dejó de funcionar.

De haber cambiado el beneficio individual por el general y acortado las abismales diferencias económicas, sociales y políticas entre las personas, la cooperación y la confianza de la especie humana se hubieran ampliado hasta conseguir un amor mutuo, comprensivo de un sentimiento más superior, jamás experimentado. Pero no fue así. Y la dura avaricia de unos pocos ricos y poderosos rompió el saco destruyendo la vida conocida, sin pena ni gloria, cayendo en manos de terceros: organismos inteligentes e híbridos, contra los que el hombre nada pudo hacer.

De nada sirven los deseos.  Los humanos, sometidos al destino de la muerte, pronto agotarán su ciclo de vida, sean acaudalados, poderosos y dirigentes políticos: un trío inseparable que encaja a la perfección con el dinero efectivo para chantajes, sobornos y corrupciones.

La Naturaleza a través de la entropía tiende al equilibrio y continuará su camino sin saber nada de los masoquistas seres humanos que la destrozaron. A éstos, se les extinguirá la memoria de sus grandes éxitos y fracasos, las enormes diferencias entre ellos, los funestos resultados que llevaron a la humanidad a desaparecer.

Hoy y ahora, todavía estamos a tiempo de orientar el camino hacia el amor, el supremo hacedor de la vida perfecta, aunque para conseguirlo habrá que transitar antes por los caminos del bien común que satisfagan a todas las personas ocupadas, conforme a sus aptitudes, en el bienestar general de la humanidad. Se tardará, sí; pero habrá merecido la pena, sin duda.

A menudo, me hago preguntas como las que siguen: ¿Es mejor dar que recibir? ¿Somos los seres humanos el término de la evolución?

Pese a cuanto antecede, no consigo hallar una respuesta definitiva y acepto ser lo que soy. Entre otras cosas porque no me queda más remedio; si bien, mi propósito consiste en ser mejor persona para que, en tal sentido, se orienten los cambios a realizar en mí mismo y en el Sistema Capitalista salvaje del que tanta tinta hemos vertido últimamente en el presente blog.

sábado, 1 de marzo de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XIX

Reconozcamos que en realidad no hay vida sino seres vivos: nosotros, los humanos, entre ellos. Reconozcamos que el bien común es el valor más importante y ha de establecerse como el objetivo principal para la subsistencia, individual y colectiva, utilizando y defendiendo los recursos a nuestro alcance, el medio ambiente y la evolución natural de todos los organismos que poblamos La Tierra.

Nuestro tránsito, llamado vida, ha de pasar por tener las menores dificultades posibles, algo dependiente de infinidad de vicisitudes y circunstancias poco controlables, además de poder ocuparnos en una actividad con la que lograr unos salarios y beneficios dignos que nos lo permitan. Hemos, pues, de convivir en armonía con cuanto nos rodea, continuar desarrollándonos hacia la igualdad de oportunidades, caminar en libertad sin coacción alguna y buscando ideas con las que alcanzar acuerdos beneficiosos para la mayoría social.

El mundo laboral y empresarial que nos hemos dado se necesitan mutuamente y han de participar por igual de los medios y recursos creados y por crear para su desarrollo y bienestar. Recordemos el L.P.L. (Legítima Pertenencia Laboral) del que ya hablamos en este blog e introduzcamos ahora más medidas al respecto:

1– El fin de toda persona física será su propio bien y el de los demás.  El fin de toda persona jurídica será el bien común y obtener los beneficios necesarios para ello.

2– Los impuestos serán progresivos a las rentas y los beneficios de las personas. Tendrán que ser tenidos por justos, claros e indispensables para cubrir, al menos, las necesidades básicas (salud, educación, seguridad, justicia, infraestructuras…) 

3 - Los sueldos no deben exceder en una misma empresa más de 10 veces unos de otros. El sueldo menor de subsistencia ha de ser el Mínimo Vital necesario para que una persona pueda vivir dignamente. Las ganancias empresariales, una vez descontados sus costos, realizados sus ajustes y amortizaciones, serán repartidas en cuatro partes, al 25% cada una de ellas, para impuestos, reservas, trabajadores e inversores con el fin de que la distribución de la riqueza sea más equitativa y cada cual desempeñe su función.

4 – El Sistema Capitalista salvaje actual ha de cambiar por otro menos agresivo, más moderado como el propuesto, adecuado a posibles variables ya apuntadas:

a)        a) Regulando las herencias que pasa por limitar las mismas en consonancia al patrimonio neto del finado y el número de herederos legales directos.

b)          b) El capital social de una sociedad (acciones/participaciones) no formará parte de ninguna herencia y pasará a ser propiedad de la propia empresa.

5 - Los Autónomos, una vez tengan que pagar cinco sueldos, los de ellos incluidos, dejarán de serlo para convertirse en sociedad mercantil y separar económicamente su vida económica personal de la de su negocio. 

domingo, 23 de febrero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XVII

 

Continuando el camino emprendido para alterar el Sistema Capitalista salvaje actual por otro más justo y moderado que permita igual protagonismo a empresarios y trabajadores, señalamos a continuación algunas pautas más a seguir de las que hemos venido indicando:

1 – Imbuir el espíritu de solidaridad humana desde la infancia.

2- Tener previsto, por parte del Ejecutivo, el repuesto necesario ante una catástrofe, contingente o desabastecimiento que se produzca, empleando todos los recursos a su alcance sin que persona alguna quede desamparada o al albur de su suerte. Los impuestos han de servir también para no ahondar más en la separación económica y social de los ciudadanos, además de paliar los daños sufridos.

3- Replantearse errores pasados. No tolerar dictaduras, radicalismos, nacionalismos, políticas que atenten contra la dignidad de las personas. Subsanar y rectificar las medidas mal ejecutadas o consideradas nocivas. Respetar los gobiernos legalmente establecidos y las asociaciones internacionales que representan a la mayor parte de los Estados del planeta.

4- Valorar permanentemente la conducta general de la gente, animándola a ser mejores personas, más responsables y cooperantes, dignos herederos del bien común. Los poderes públicos y los ciudadanos estarán obligados a cumplir las leyes establecidas democráticamente. De ello tendrá que ocuparse un Poder de Buenas Prácticas nombrado por los ciudadanos en cada una de sus poblaciones, comunidades y a nivel nacional.

5- El hecho de modificarse el objetivo empresarial del ánimo de lucro por el del bien común, las participaciones, acciones o partes del capital de una sociedad serán heredadas por la propia sociedad a fin de que la misma haga uso de ellas conforme a sus estatutos, procurando que las decisiones a tomar dependan de la paridad entre los empresarios (propietarios, capitalista, emprendedores, inversores) y el conjunto de los trabajadores (obreros, peones, proletarios, jornaleros, empleados).

6 - Europa ha de convertirse en un Gran Estado de derecho y democrático por los países que la forman. Para eso, pues, no cabe la menor duda, han de desaparecer de su territorio el dinero físico y los paraísos fiscales, ajustar los impuestos más progresivamente, regular herencias, rentas, beneficios y reservas empresariales, implementando normas liberales y democráticas en las costumbres, vigilando los efectos desestabilizadores y obrando en consecuencia sobre la emigración, el trato a las personas físicas, la prostitución, las organizaciones secretas, las religiones, los productos nocivos, las drogas, las oligarquías, los monopolios, la competencia ilícita y desleal, las corrupciones, el tráfico de influencias, los sectores básicos y demás cuestiones que,  semana a semana, hemos venido desgranando en este blog. 

7 - Escuché decir: “Los derechos no se otorgan, se toman por la fuerza”.  Una cuestión no civilizada achacable a tiempos donde el acuerdo se ignoraba, la democracia no se practicaba, ni los ciudadanos y partidos eran personas dialogantes. El Sistema Capitalista moderado a establecer nos hará ver las cosas de otra manera transformando la agresividad en cooperación, el ánimo de lucro en bienestar general, el no poder vivir en el dejar vivir, los buenos deseos en una realidad.

8 - La capital de España debería ser itinerante. La sede del Parlamento o del Gobierno también. Cambiar de ubicación los centros oficiales a poblaciones poco habitadas, descongestionaran las que ya lo están y crearán zonas más residenciales. 

9 – Cuestionar todo tipo de creencias (sean o no religiosas) no ha de ser delito ni siquiera falta de respeto a los demás; si lo serán, por el contrario, imponerlas como únicas, incuestionables o verdaderas.

10 – La libertad es un valor sagrado y su uso significa responsabilidad, compromiso, respeto…, por lo que toda persona ha de ser libre para tomar la decisión que le parezca asumiendo las consecuencias que por Ley puedan acarrearle. Casarse con quien se quiera, divorciarse, separarse, suicidarse, prostituirse, pedir la eutanasia, creer, trabajar, elegir profesión… son actos de libertad. Los actos de no libertad son aquellos que limitan, prohíben, coartan sin razón de peso que lo justifiquen.

11 – En la nueva sociedad que se forme, han de tener cabida las actividades, negocios y propiedades públicos, comunes o del Estado y los privados, personales o particulares, en lícita competencia.

12 – Entremos en un nuevo Sistema Capitalista, económico y social, moderado y liberal, desprendiéndonos de las ataduras que nos lo impiden, comenzando por regalar a un enemigo el perdón; a un oponente la tolerancia; a un amigo tu corazón; a un cliente el servicio; a un niño el buen ejemplo; a ti mismo la compasión y a toda la gente la caridad henchida de identidad, empatía, cariño, respeto y serenidad.

La próxima semana, y penúltima, más.

 

 

domingo, 16 de febrero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XVI

Como todo el mundo sabe son muchas las diferencias entre las personas físicas y las jurídicas (1) y entre el inicio del Sistema Capitalista al actual (2).

L.P.L.: Memoricemos estas siglas. Serán de utilidad recordarlas.

La constitución de cualquier sociedad deberá formalizarse como hasta ahora se viene realizando, si bien, sugerimos una importante modificación para cuando la citada compañía tenga cinco o más de cinco operarios fijos en plantilla. En tal caso, las empresas y asociaciones mantendrán en el activo de sus balances contables una cuenta de orden con el título de Legitima Pertenencia Laboral, cuya cifra será el importe del 50% del capital social de las mismas, propiedad de todos los trabajadores fijos en activo, con iguales derechos y obligaciones que los accionistas o participes de estas. Por tanto, ambas partes tendrán en su conjunto comunes intereses, correrán la misma suerte y avatares, se ajustarán a las reducciones y ampliaciones de capital que se produzcan y, con carácter individual, la totalidad de los trabajadores percibirán la mitad de los beneficios que se repartan, ostentando la mitad de los cargos del consejo de administración y con voz y voto en las juntas generales; no obstante, tales bienes y derechos de Legitima Pertenencia Laboral, no los podrán negociar, vender, ceder, pignorar o testar, siendo extinguibles por cese del trabajador en la sociedad por cualquier motivo: despido, jubilación, muerte, incapacidad.

Una misma persona física puede ser al mismo tiempo inversor (accionista o participe) y trabajador de la misma compañía, por lo que le corresponderán los derechos y obligaciones por ser socio capitalista y por ser trabajador.

La política de una empresa pasará a depender de la totalidad de las personas que la componen: la parte económica (accionistas/participes de valores negociables) y parte laboral (empleados/obreros de valores legítimos e intransferibles). Es decir, la correlación de fuerzas y las decisiones serán tomadas al 50% por cada una de las dos partes que forman la sociedad.

Las acciones/participaciones de la parte económica/capitalista podrán ser pignoradas, vendidas, donadas por sus titulares, pero no podrán dejarse en herencia, es decir, no sumarán en la masa hereditaria de un finado, por lo que, al contrario de lo que ahora sucede, pasarán a ser bienes de la propia empresa, que decidirá su destino.

Los motivos de tales cambios son obvios. Las empresas serán dirigidas en igual proporción por el trabajo y el capital, aunque cabe suponer que, a través del tiempo, ambas partes quieran ser mayoritarias en la toma de decisiones. Los trabajadores fijos comprando acciones/participaciones para tener más votos y beneficios. Los inversores/capitalista para, además de obtener sus beneficios, optar a una ocupación fija en la misma empresa y, antes de morir, ocuparse de que sus acciones/participaciones no se pierdan y queden en poder de quien desee, donándoselas o vendiéndoselas. Todo ello encaminado hacia el bien general de trabajadores y propietarios, la continuidad de la propia sociedad y el avance del reparto de la riqueza más justo y razonable.

(1)    Las primeras responden por si, dan la cara, tienen derecho a votar y a ser votados, a comprar, vender, testar, donar o abandonar su patrimonio. Las jurídicas necesitan de ser representadas por una o varias personas físicas para todo acto o transacción que realicen y su capital, dividido en acciones o participaciones, estará en manos de terceros (personas físicas o jurídicas) cuya responsabilidad, por lo general, estará limitada al valor de su aportación al margen de otros aspectos económicos, sociales, culturales y políticos que en su nombre puedan desarrollar.

(2)    El Sistema Mercantil del siglo XV al XVIII, el industrial del XIX, el financiero y monopolista del XX, el global y neoliberal del XXI y nos conducen al salvaje capitalismo que se avecina.

domingo, 9 de febrero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XV

 

El dios del crecimiento económico eterno no existe, va en retirada y está a punto de morir. Los mensajes que recibimos lo vaticinan: el crecimiento perpetuo no es posible. Ha llegado el momento de una nueva política económica. Detengamos de una vez la especulación, la codicia, la corrupción…; al fin y al cabo, nos conducen igualmente al destino que todos los seres vivos tenemos reservado: la muerte.

¿Sería conveniente olvidarse de las luchas que nos enfrentan por ganar más, por ser los más atractivos o los mejores si gozamos de unas rentas, salarios o ingresos que nos permiten vivir dignamente? ¿Para qué queremos más si la muerte nos aguarda? Las cuestiones de confianza en nosotros mismos, sí que son importantes.

Vivimos. Estamos aquí leyendo, discurriendo, innovando…; tengamos presente una abrumadora verdad, la única verdad: tenemos una sola una vida. ¿Merecerá la pena discutir compulsivamente o de la forma que lo hacemos si no la aprovechamos?

Seamos conscientes que el bien común y ayudar a los demás, a cambio de nada, nos harán ser mejores personas. Ello nos favorecerá para ser felices y sentirnos más a gusto con nosotros mismos. Toda una pasada si lo conseguimos. Será cuestión de proponérselo y ello significará el paso recto que nos dé libertad y confianza.

La Democracia necesita pues, creer que todos los hombres podemos ser iguales y apuesta por lograrlo, pero eso no sucederá en estos tiempos, del mismo modo que Sísifo jamás logró alcanzar la cima empujando su roca. No obstante, siendo responsables, hay que hacerlo trabajando por ello. Nos proporcionará salud mental y si, además, nos satisface, humanizaremos nuestras vidas con tan solo intentarlo.

Preservar la Democracia de sus enemigos nos permitirá, pasado un tiempo, explorar nuevas rutas y oportunidades dejando atrás el capitalismo y su especulación, el trabajo físico mal pagado y su pobreza, el poder y su dinero corrupto… Todo quedará en manos de artilugios y máquinas con inteligencia artificial que se ocuparán de realizar transacciones perfectas mientras los humanos estaremos en el lugar correcto, en el que cada cual tenga, conforme a sus aptitudes y deseos, las ocupaciones transformadoras hacia una especie humana henchida de luz, paz y comprensión.

La Declaración de Independencia de EE. UU, de 1776, dice: Sostenemos como evidentes estas verdades: que todos los hombres son creados iguales; que son dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre éstos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad; que para asegurar estos derechos se instituyen entre los hombres gobiernos que derivan sus justos poderes de la... entre lo que cabe destacar los siguientes puntos e ideas: Dios hizo a todos los hombres iguales y les dio los derechos a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. La principal tarea del gobierno es proteger estos derechos. Si un gobierno intenta retener estos derechos, el pueblo es libre de rebelarse

¿Lo sabrán Donald Trump y su troupe, amigos del poder y dinero, que morirán como los demás mortales?

 

domingo, 2 de febrero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XIV

 

El bien común, del que estamos ocupándonos en esta serie de mensajes relativos al Sistema Capitalista actual, no es una idea o un deseo particular si no, a mi juicio, la esencia suprema de una sociedad democrática que, como es justo reconocer, se basa en la libertad, la justicia y la igualdad. Unos valores que, desde la infancia y al menos en espíritu, se deberían impartir e instaurar como modélica conducta en las almas humanas a través de padres, educadores y autoridades con el ejemplo. Unos valores éticos y humanitarios cuestionados, sin duda, por las abismales diferencias económicas, dado que el ánimo de lucro que nos rige, al frente de un dios llamado dinero, infringe la ley continuamente.

“Importa más la paternidad del espíritu que del cuerpo”. Solo la grandeza del espíritu es inmortal. La educación es, en definitiva, el verdadero problema. “Un sentimiento es una idea hecha carne”. “Amaos los unos a los otros para vuestro reciproco beneficio”, son frases copiadas que responden a la honradez y la solidaridad humana con las que debemos de crecer. Es verdad que lo más fuerte sobrevive, pero lo más fuerte no es lo material; lo más fuerte es la piedad, la clemencia, el perdón, la compasión, …, el amor.

Acordémonos de cuando a bancos y cajas de ahorros no les estaba permitido remunerar sus depósitos por encima de un porcentaje de interés legal establecido. Entonces, tales entidades de crédito lo superaban pagando un extratipo en efectivo que era la diferencia entre el tipo legal y el convenido con el cliente, es decir, dichas entidades, a través de sus apoderados, infringían la ley y sus clientes también.

El dinero físico, como desde siempre venimos sugiriendo, se está regulando y como tal desaparecerá. Las prácticas deshonestas que con él se practican serán desterradas o dejarán huella si se realizan. No obstante, surgirán medios de cobro, pago y otras transacciones que, exentos de costos, merezcan la pena ponerlos en marcha ajustando, ordenando la distribución de la riqueza, variando los modelos de empresas, los capitales, las herencias, los beneficios, el trabajo, los impuestos…

Si la ciudadanía consigue la igualdad de oportunidades y el bien común goza del predicamento justo y preciso para ponerlo en marcha, el objetivo para que la generalidad de habitantes marche mejor será un hecho, el mundo será más limpio y los hombres más humanos.

En las siguientes entradas de este blog mostraré las diferencias substanciales entre los valores creados por el esfuerzo social y aquellos que su génesis proceden del trabajo particular. A la sociedad, lo que es de la sociedad y para el individuo, lo que produce el individuo. El esfuerzo mancomunado de muchas personas hay que diferenciarlo de la voluntad y el esfuerzo individual. Ambos han de prevalecer y convivir en armonía de igual forma que lo público y lo privado.

domingo, 26 de enero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XIII

 

Alguien preguntó: “¿Quién trabajará en España si al desempleando se le paga una retribución suficiente para cubrir su hambre? ¿Si las personas vulnerables (incapacitados por enfermedad, familias sin trabajo con hijos menores, jóvenes sin ingresos ni oportunidades para trabajar, viudas, ancianos, huérfanos menores de edad, emigrantes o abandonados…) gozan de subvenciones, ayudas, de un salario mínimo interprofesional u otro tipo de asistencias? “. Alguien contestó: “Pregunta si es o no razonable a Trump, un delincuente y presidente del país más rico y democrático del mundo, que odia a las personas más desfavorecidas”.

El Sistema Capitalista, aun siendo el mejor conocido, antesala de la corrupción, injusto, desigual y símbolo de la vida actual, necesita ser mejorado. Cada semana venimos hablando de él convencidos de que ha de ser modificado, aunque intuya que, con el “dueño del mundo” citado, todo cambie en sentido inverso al que vengo pregonando con el fin de aminorar las abismales diferencias sociales, políticas y económicas; con quejas y sugerencias creyendo que, ni siquiera ante la ley, somos iguales.

Contar es dar y agradecer. También lo es proponer que el objetivo principal de la humanidad sea mejor propiciando el bien común en lugar del ánimo de lucro. Un valor colectivo antes que uno individual.

Ya va siendo hora de que en un país democrático se comience a pensar (y lograr) que el dinero no lo pueda todo. Cierto es que llegará otro tipo de dinero que sustituya a los anónimos billetes y monedas actuales, aunque confiamos que sea identificable y deje huella a través de tarjetas, transferencias, aplicaciones… con las que poder perseguir, identificar y evitar delitos y, en su caso, localizar y castigar a los culpables.

Dado que en la mayoría de las sociedades la codicia carece de límites, siendo la corrupción su más segura servidora, está claro que hemos de regular el Sistema Capitalista y sorprender a la avaricia con menores atractivos para que no se produzca variando las costumbres ciudadanas, las normas y las leyes.

Costumbres, normas y leyes en las que el espíritu solidario humano prevalezca; en los que ni siquiera la corrupción, el soborno o sus intentos tengan cabida porque no merezcan la pena realizarlos.

Libertad es hacer lo que se quiera, pero en una sociedad saludable se han de respetar las normas y leyes establecidas. El mercado se regula con la oferta y la demanda, pero ante los bienes básicos, imprescindibles para la vida (salud, cobijo, alimentación, educación…), el mercado ha de intervenirse.

Las reformas del Sistema Capitalista que vamos desvelando a través en estas líneas modificando acciones y valores, hábitos y formas, normas y leyes sea sobre las testamentarias, tributos, empresas, trabajadores, distribución de la riqueza…, además de importancia vital son, a mi juicio, fácilmente realizables como pronto podremos comprobar  reafirmándonos en las medidas a seguir.

sábado, 18 de enero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XVIII

 

No conozco realmente a nadie que siendo un trabajador por cuenta ajena se haya hecho rico. Tampoco conozco a ningún rico que no quiera ser más rico o desee ser pobre. Por lo general, nadie trabajando por cuenta ajena se hace millonario salvo que herede una fortuna o le toque la lotería y pueda vivir de las rentas o de la suma de sus inversiones. Lo normal sería que todos viviéramos del fruto de nuestro trabajo o de la pensión que, en su caso, nos corresponda.

No es de recibo que producto de un legado alguien deba de vivir sin trabajar u ostentar un cargo que sea incapaz de realizar y menos dirigir. No obstante, el Sistema Capitalista o cualquier sistema económico, hasta ahora establecido, así lo mantienen. Posiblemente sea por un instinto humano egoísta tratando de favorecer a los herederos cuando en realidad la herencia del finado no solo proviene de su trabajo por cuenta propia o ajena sino por causas espurias, de otros difuntos anteriores o de la propia comunidad. Todo es susceptible, por tanto, de ser mejorado y nos inclinamos a que la Ley de sucesiones se modifique regulando el reparto de la riqueza y emprendiendo el camino hacia el bien común.

Cualquier Gobierno elegido democráticamente que se precie ha de procurar los intereses generales de la mayoría de los ciudadanos y, en especial, los más básicos e imprescindibles para vivir dignamente. De lo contrario, hemos de cuestionar o desacreditar a toda persona física o jurídica que se considere estar por encima de dicho Gobierno, y más si lo lleva a cabo con chantajes, amenazas, anunciando reducir puestos de trabajo, deslocalizarse, no invertir sin nada a cambio o incumplir la norma del bien común que se imponga en beneficio de la generalidad de la gente.

En mi vida profesional he asistido a hechos de corrupción que aún persisten y han de subsanarse hasta su abolición: financiaciones y prebendas renovadas una y otra vez a sus vencimientos, incrementando sus gastos e intereses, a personas significativas para, finalmente, cancelarlos llevándolos a contencioso. (Un agujero en España de “cien mil millones” nunca recuperados). Utilizar el dinero en rama, dado que no deja rastro, para transacciones ilícitas. Cruzar las fronteras con grandes sumas de efectivo para eludir impuestos. Pagar o cobrar extratipos en efectivo fuera de la Ley. Aumentar cifras en compras y gastos y/o disminuir ventas y beneficios para aminorar resultados positivos. En definitiva, infligir la Ley.

Estoy convencido que el tiempo nos va haciendo mejores personas, más legales y comprensivas, y que en épocas anteriores se vivía peor. No solo por los avances técnicos, que también, sino porque ahora, pese a las numerosas guerras existentes originadas por dementes y perversos intereses, nos sentimos más humanos.

Otra cuestión es la adaptación a las nuevas prácticas que a muchos mayores se nos resisten, como la I.A. lo hará con la joven inteligencia humana de hoy, aunque sepamos que queda mucho por optimizar como la tan aludida transformación del Sistema Capitalista hacia el bien común: un objetivo ideal a lograr.

domingo, 12 de enero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XII

 

En el mundo vegetal y animal el engaño es un motivo para la supervivencia. Ni qué decir en el mundo humano (homo erectus, habilis, heidelbergensis, nadeli, neardertalensis, sapiens) una vez fue incorporado el dinero físico como medio de cambio para ser canjeado por salud, alimentos…e, incluso, por favores, traiciones y fortunas tan amargas, a veces, como una venganza.

El Sistema Capitalista potenció el dinero físico y, aunque éste vaya en retirada, va siendo hora de que el homo sapiens se inicie en el camino hacia el hombre razonable (homo rationabile), capaz de ponerse en lugar del otro (potes pone te in alio loco) y modificar el fin empresarial del “ánimo de lucro” por el del “bien común” en contra, por supuesto, de la voluntad de los hombres más ricos.

En la actualidad, Elon Musk, no solo está revirtiendo la idea citada, sino que con el poder de su riqueza tiende a imponer gobiernos conservadores de extrema derecha en el orbe mundial por el simple hecho de ganar todavía más. Por igual razón lo hará Mark Zuckkerberg de Meta y muchos más. En EE. UU., esto es un hecho que ya ha comenzado. Mañana lo harán en otros países que les plazcan y así sucesivamente hasta que suceda lo inevitable y la democracia se destruya, dado que el bien general de la gente les importa un bledo y amasar más dinero y poder no les harta.

El Sistema Capitalista alimenta la inflación como si fuera un criado al que cuidar de forma imparable y son los negocios los que encarecen sus productos o servicios haciéndolos exclusivos bajo el lema de “renovarse o morir”, ya que su propia identidad se basa en progresar, crecer y derribar a sus competidores, salvo que se unan con ellos o lleguen a un acuerdo.

Las personas jurídicas, carentes de sentimientos, a diferencia de las personas físicas, merecen ser tratadas únicamente con argumentos fríos y calculadores, si bien, la confianza, hoy asentada en la publicidad y la agresividad de estas y empleadas en su provecho, ha de cambiarse por las diferentes opiniones de sus consumidores y usuarios: ello es lo importante.

Los clientes deberán otorgar su confianza en base a la calidad y precio de los productos o servicios adquiridos, a la consideración y amabilidad con que son tratados, a la eficacia y acompañamiento del personal que les atiende y otros aspectos relevantes, por lo que sugerimos sea implantado “El Buzón de Confianza” (responsabilidad de la Administración de Consumo), en el que los consumidores depositen un boleto (facilitado por el establecimiento) señalando un solo color de los cuatro existentes con el que evaluar la confianza de éste, de forma que marcando Boleto Verde denotará confianza absoluta; Boleto Amarillo confianza media; Boleto Rojo poca confianza; Boleto Negro ninguna confianza.

Comencemos a pensar, pues, que el dinero no lo puede todo y, poco a poco, el Sistema Capitalista se puede ir mejorando ¡claro que sí! y lo seguiremos intentando.

domingo, 5 de enero de 2025

EL SISTEMA CAPITALISTA XI

 

La Evolución de la naturaleza y el desarrollo humano nacen respectivamente del Universo, al que La Tierra pertenece, y de los pensamientos e iniciativas de los moradores de ésta para formar parte de una simbiosis armónica. Ya, en otra época, el propio Sócrates se quejaba del invento de la escritura pensando que con ello las personas perderían su memoria. En la actualidad, además de otras circunstancias, son las redes sociales, los algoritmos y perfiles, la inteligencia artificial y demás decisiones las que, en mayor medida, se crean y ocurre algo parecido (la presente crítica lo puede ser), sin embargo, se sabe que la Evolución puede discurrir para bien o para mal y es muy triste que los medios digitales estén castigando gravemente a la gente joven, causándoles una dependencia nociva y peligrosa, incitando al consumo de tóxicos o drogas que matan. Y es que cualquier adicción no es saludable para nadie, salvo las obligadas por nuestro organismo (respirar, pensar, comer, …) y las prescritas a causa de un dolor o enfermedad que han de ser paliadas. He leído que el 25% de los crímenes y ocho de diez estafas en España, suceden en la red. 

El Sistema Capitalista actual, ávido por obtener más dinero, todo lo propicia; si bien en él no está la felicidad. Una felicidad por lograr que debiera ser la meta: un camino iniciado hacía el bien común, gozando de un trabajo con el que ganarse la vida, costeando las necesidades básicas (comida y cobijo, educación y salud…) en democracia, libertad, respeto e igualdad de oportunidades: el auténtico triunfo de la humanidad, aunque existan enriquecimientos sin imponernos la esclavitud.

El mal uso de lo que se posee y sobre todo la avaricia empresarial e individual por obtener más beneficios sin reparar en sus consecuencias, se han convertido en un arma de destrucción masiva. En general, los mensajes en las redes sociales, las escenas que en las mismas se exhiben, las mentiras y desinformaciones que se trasmiten influyen en los jóvenes para cometer actos siniestros, infinidad de muertes y daños irreparables (suicidios, abusos, crímenes, drogadicción, pornografía, pederastia, ruina moral, económica…) originados por sus autores para conseguir fama y más dinero, sin importarles el bien general de la gente. 

La Comunidad Económica Europea tiene la llave para unificar las normas de uso de todas las personas físicas y jurídicas que habitamos en su territorio a fin de establecer el bien común como el objetivo prioritario, siendo ineludible que las empresas obtengan justos beneficios y paguen salarios dignos. Esto se puede conseguir si se regula todo aquello que vaya en su contra o no respete sus normas, tendentes a lograr el acuerdo, el entendimiento, el reparto ecuánime de la riqueza, la recuperación de un medio ambiente sano y saludable.

Cada uno de nosotros aisladamente somos una simple fibra, sin embargo, unidos o entrecruzados formamos un cáñamo firme, una soga prácticamente irrompible. No renunciemos a las ideas e iniciativas, provengan de donde provengan, pero no demos pábulo a las mismas sin son maliciosas, interesadas e inconsecuentes.